dc.description.abstract | La situación de dependencia es una situación de carácter vitalicio en que una persona necesita la
ayuda de otra para su subsistencia o para los actos más esenciales de la vida. Aunque generalmente la
dependencia es provocada por la edad, hay otras causas, como la enfermedad o la discapacidad.
Tradicionalmente se han destinado distintas medidas o acciones como el sistema de seguridad social
(a través de complementos para gran invalidez), el sistema de salud (a través de asistencia sanitaria y
hospitalización), el sistema de servicios sociales (a través de centros de día o residencias), el sistema
de asistencia social (prestaciones para discapacitados, ancianos, etc.) y, otros sistemas más concretos,
como el de protección a la familia o el de atención a los discapacitados, o el de conciliación de la vida
laboral y familiar,
En lo que respecta a la política social, el sistema de atención a la dependencia y de apoyo a la
autonomía ha sido el último pilar desarrollado por parte de los países miembros de la Unión
Europea. En el periodo comprendido entre los años 1950 y 1980, los países desarrollados con
Estado de Bienestar tenían un sistema de protección social que combinaba la intervención familiar
con una mínima aportación institucional. Pero, en la última década del siglo XX aparecen las
primeras leyes de dependencia, y se abre un proceso de transición sociodemográfica que cambia la
base social del riesgo, y redefine el papel tradicional del Estado, de la familia y la sociedad. La razón
de este cambio se encuentra en la incorporación de la mujer al mercado de trabajo, reducción del
núcleo familiar, corresponsabilidad en los cuidados familiares, reivindicación de ayudas para personas
dependientes y sus cuidadores. | es |